Desde Animales de Oriente estamos construyendo un refugio para alojar a los perros que pasan por nuestra protectora mientras les buscamos casas de acogida o adopciones permanantes. Trabajamos sobre un terreno que nos cedió el Ayuntamiento de Infiesto, que cuando lo vimos por primera vez, no era más que un recinto abandonado e impenetrable por los matorrales y por el bosque. Hoy es un recinto bayado, limpio, con agua, con espacio y casetas para los perros. Nuestra tarea, ahora, es mantenerlo.